Posiblemente sea la historia más emotiva que se recuerda con un perro como protagonista. Hachiko, como hacía todas las mañanas, esperó a su dueño nada menos que diez años cuando este ya había fallecido. El Akita, que terminó sus días en la estación que ya no abandonó durante todo ese tiempo, llevó al límite el significado de fidelidad y lealtad hacia su amo y su historia se extendió, primero por Japón y más tarde por todo el mundo.
El reconocimiento hacia su figura no ha dejado de crecer con el paso del tiempo. Una estatua en la estación, una adaptación cinematográfica a su historia, multitud de referencias con historias similares.
Basada en una historia real, Siempre a tu lado, Hachiko (2009) cuenta la historia de un perro que vivió en Japón en los años 20 junto a su dueño, al que demostró de tal forma su fidelidad que cada día iba a esperarle a su llegada a la estación. Hasta que un día, su amo no volvió a regresar al fallecer en un accidente laboral. Lo que no evitó que Hachiko continuara acudiendo a la estación cada día durante el resto de su vida. La historia caló tan hondo y fue tan emocionante que en esa estación este famoso perro tiene una estatua de bronce, construida en su honor. Hachiko fue interpretado por tres perros de la raza Akita Inu (Chico, Layla y Forrest) para cada una de las etapas de su vida.
La película estadounidense, remake de una cinta japonesa de 1987 sobre el mismo protagonista, se estrenó en 2009 bajo la dirección de Lasse Hallstrom y protagonizada por Richard Gere. Recibiendo críticas positivas y la aprobación mayoritaria de los espectadores. Sobre todo los más sensibles y amantes de los animales, que cayeron rendidos ante una cinta de lo más emotiva y enternecedora que se mantiene con un puesto fijo entre las películas con perro protagonista más conocidas que se han filmado. Y es que a buen seguro su mascota protagonista sea uno de los perros más fieles que, primero la historia, y después el cine, nos ha regalado.
